El compromiso del Plan MRI con las BPA (buenas prácticas agropecuarias) y -en especial- con la adopción de refugio en los maíces Bt, sigue avanzando y sus éxitos se validan en el tiempo. La dedicación, la investigación y la comunicación entre técnicos, especialistas y productores, ha logrado progresos determinantes, que ya nadie puede negar y al que todos se están sumando.
Los que hayan visto un campo de maíz devastado por no tener protección contra plagas, saben que es un escenario desastroso, con pérdidas millonarias y un penoso retroceso a prácticas agrícolas del pasado.
El conocimiento teórico y práctico del manejo de resistencia de insectosplaga, realmente ha hecho la diferencia en la productividad, la sustentabilidad y el rinde para cada cultivo que lo adoptó.
Desde MRI tenemos el privilegio de estar en contacto permanente con la primera línea de fuego contra las plagas, técnicos, productores y científicos con décadas de experiencia, que nos están revelando las claves de sus éxitos y desafíos, sus historias de aprendizaje y testimonios de primera mano sobre la adopción de refugio y la resistencia de las plagas.
Esta información y estos profesionales son tan valiosos para nuestro campo que les estamos dedicando una serie de docu-reportajes, dentro de una campaña de comunicación orientada a consolidar la adopción de refugio para conservar la tecnología Bt, en donde te contamos un caso modelo de resistencia de insectos, ocurrido en la campaña 2012/13 en San Luis, cuando la ausencia de refugios, entre otros factores, ocasionó el desarrollo de resistencia de Diatraea (barrenador del tallo) a dos tecnologías Bt, con pérdidas millonarias que fue una verdadera catástrofe para el maíz de la región y una amenaza definitiva para las tecnologías Bt.
Con el esfuerzo, el compromiso y la dedicación de todos los involucrados, se implementó un plan de mitigaciónque reunía capacitación de los productores, siembra de refugio y monitoreo del cultivo. Este logró recuperar el control de la plaga y estabilizar los rendimientos, dejando aprendizajes invaluables, uniones fortalecidas entre los sectores protagonistas y un caso excepcional del que se nutrieron las experiencias posteriores.
El caso San Luis: Maíz Bt en peligro crítico
Los maíces Bt se utilizan para controlar plagas de lepidópteros, reducir el uso de insecticidas y mejorar la calidad del grano y si no se toman las medidas adecuadas, la resistencia a las proteínas Bt reduce la efectividad de la tecnología.
El Programa MRI se basa en la adopción de un conjunto de BPA: siembra de refugio, monitoreo de plagas y malezas y rotación de cultivos.
La zona afectada se encuentra en el departamento de Ayacucho, San Luis, limitada por sierras y con condiciones áridas al oeste y norte. Un área de montes bajos con gramíneas que actúan como hospederos naturales de Diatraea saccharalis.
El cultivo de maíz en la región cubre aproximadamente 10 mil hectáreas, con siembras tempranas y tardías, lo que permite encontrar maíz en pie durante casi todo el año. En diciembre de 2012 se detectó un daño inesperado de Diatraea saccharalis en dos tecnologías Bt ampliamente sembradas en la zona. Esto activó las alarmas y se abordó el problema integralmente: productores, técnicos, trabajadores del campo, empresas e instituciones tenían un enemigo común y se unieron para dar un salto de excelencia en la lucha.
Cuando se empezaron los monitoreos y el análisis del fenómeno, se detectó que existía una rotación deficiente de los cultivos, con siembras de maíz sobre maíz o trigo (ambos hospederos de Diatraea saccharalis). Los productores no habían implementado las buenas prácticas del caso ni habían adoptado refugios en los lotes, a pesar de las campañas de comunicación. Se habían dejado de realizar monitoreos de plagas y aplicaciones de insecticidas tras la introducción de los maíces Bt. Y a esto se le sumaron las condiciones climáticas de la zona, que favorecen un mayor número de generaciones de la plaga por año.
Después de un período de tensiones y repartición de responsabilidades, cuando se superaron algunas hostilidades iniciales, empezó un proceso de acciones conjuntas que lo cambió todo.
Las empresas registrantes y licenciatarias de las tecnologías Bt afectadas trabajaron en conjunto para desarrollar un plan de mitigación. Se realizó un monitoreo de la plaga en zonas aledañas a la del problema, sin encontrar daños significativos, mapeando la zona crítica con claridad.
Especialistas en biología, control de plagas y manejo de resistencia visitaron la zona y se reunieron con productores. En conjunto se diseñó un plan de mitigación y contención para reducir la presión de la plaga. Se desplegó una implementación asistida por especialistas, con el pleno compromiso de productores y dueños de los campos afectados.
En perspectiva, se confirmó que la falta de implementación de refugios y un manejo inadecuado de los cultivos fueron las principales causas del daño inesperado, luego confirmado como resistencia, causado por Diatraea saccharalis, agravados por las condiciones de clima y bioma particulares de la zona.
Se demostró que es crucial para los productores adoptar las prácticas de manejo recomendadas para retrasar la proliferación de plagas resistentes. La colaboración entre empresas, productores y entidades gubernamentales fue fundamental para las gestiones efectivas del medio y largo plazo.
MRI: En lo importante, haciendo historia
En la protección de los cultivos de maíz Bt está cifrado el futuro del agro, el uso de refugio retrasa el desarrollo de resistencia y hoy ya se presenta como una solución efectiva, al alcance de todos y con el consenso de toda la cadena productiva agroindustrial. Desde la semilla, la preparación del lote, la cosecha, la producción y el comercio, cuentan con que el refugio está haciendo lo suyo para proteger cada lote eficientemente.
Los refugios son áreas del lote de maíz que se siembran con plantas no modificadas genéticamente (no-Bt), tienen la función de generar insectos adultos susceptibles que se crucen con los resistentes provenientesdel maíz Bt, evitando que las plagas se vuelvan inmunes a esta tecnología clave. El refugio es la principal herramienta para alargar la vida útil de la tecnología. Su relevancia va mucho más allá de ese 10% que ocupa en el lote.
- Protege tu inversión: retrasando el desarrollo de plagas resistentes y las pérdidas de cosecha asociadas.
- Asegura la sostenibilidad del cultivo: permitiendo que la tecnología Bt siga siendo efectiva a largo plazo.
- Aumentan la calidad del grano: reduciendo la presencia de micotoxinas al controlar plagas de la espiga
La implementación se volvió cada vez más eficiente. Aquella experiencia de la campaña 2012/13 sentó las bases del crecimiento en adopción de refugio y dio resultados, pero además tendió puentes entre productores y técnicos que encontraron un funcionamiento complementario exitoso.
Ya todos los productores pueden consultar con un técnico agrónomo que les brinde asesoramiento personalizado y le ayude a diseñar un plan de manejo de la resistencia adecuado para su campo. Cada vez son más los que aprovechan la campaña "Sembrá Maíz con Refugio", impulsada por MRI y la AsociaciónSemilleros Argentinos (ASA), ofreciendo información, herramientas y asistencia para facilitar la adopción de refugios y otras BPA.
Ya lo sabemos: el 10% del lote es la superficie recomendada para refugio en maíz.
¡No esperes a que sea demasiado tarde!
Seguí con atención nuestras redes, especialmente nuestro canal de YouTube, donde iremos subiendo todos los capítulos de la serie "Vida de Campo", una iniciativa totalmente original en su tipo. Verás más sobre la resistencia a barrenador del tallo que se dio en San Luis y otros temas, con el testimonio de sus protagonistas y la información que nos revela la importancia de las BPA y la adopción de refugio para pisar firme en el futuro de nuestro agro. Desde MRI nos sentimos promotores del refugio y guardianes de la tecnología Bt.
En la historia de la humanidad, en todas sus invasiones y guerras, hay un patrón que va desde las invasiones de los Pueblos del Mar en 1200 a.c, las persistentes invasiones bárbaras hasta el siglo V en Europa o la conquista de otros continentes: siempre los atacantes se sirvieron de la ventaja que otorga la sorpresa. Quienes eran atacados no tenían forma de prever el ataque ni desarrollar una defensa y resistir. El invasor llegaba a lugares en los que ni siquiera sabían de su existencia y arrasaba territorios enteros, condenando a la desaparición o la ruina a poblaciones de las que apenas nos quedó testimonio.
Cuando se sabe que hay un invasor, la agudeza de los grupos humanos en la defensa de sus territorios es diligente, valiente y evolutiva. El conocimiento que tenemos de las plagas invadiendo los cultivos ha construido una tradición que nos convoca. Nosotros aceptamos el desafío y trabajamos para hacer historia.
Están todos invitados a saber más para hacer las cosas cada vez mejor.
Asistente técnico 
