El Día del Campo celebra el protagonismo del medio rural por su importancia en la agroindustria y el bienestar social. Celebra el trabajo comprometido de hombres y mujeres vinculados a las tareas agropecuarias a través de toda la cadena productiva. Invita a reflexionar sobre la importancia del campo por su rol en la producción de alimentos y energías, la generación de empleo y el cuidado del medio ambiente.

La celebración se originó como una propuesta argentina a la que otros países se sumaron para compartir los valores, las tradiciones y el protagonismo de cada producción regional en su aporte al crecimiento y las riquezas nacionales.   

El 7 de marzo se fue consolidando como una oportunidad excelente para visibilizar los temas más relevantes del campo y su agenda, escuchando directamente la voz de sus protagonistas.   

Campo y sociedad: latiendo y respirando a la par

El campo late y respira como un organismo vivo, un cuerpo donde cada industria es un órgano, las actividades agropecuarias componen sus tejidos y cada productor es una célula vital para un crecimiento sostenido en el tiempo.

Cada aspecto relevante de la sociedad tiene correspondencia directa con compromisos asumidos y promovidos por la agroindustria: responsabilidad alimentaria, legislaciones proactivas, difusión científica y educación, tecnología e innovación, mercados y producción, entre otros. Múltiples áreas se conjugan en armonía para sostenerse, impulsarse y consolidar su modelo de desarrollo. 

Los ciclos virtuosos de la industria agropecuaria siguen el pulso de los ciclos vitales de la naturaleza. El diferencial del campo está en la aplicación tecnológica, el compromiso por garantizar la sustentabilidad y la rentabilidad de cada cultivo.

El trabajo de cada productor se traduce en diversas formas de satisfacer demandas y la sociedad cuenta con ellos cada día. Desde que desayunamos, nos vestimos, consumimos bienes o usamos transportes, el campo siempre está ahí; a veces invisible pero siempre imprescindible.

MRI: En el día a día de los productores

El Programa MRI de la Asociación Semilleros Argentinos (ASA) es un caso modelo del compromiso del sector con la sustentabilidad y el futuro de la agroindustria argentina. Se promueven y difunden las buenas prácticas agropecuarias (BPA), la adopción de refugio y el cuidado de las tecnologías Bt en los cultivos. 

Junto a los otros eslabones de la cadena, acompañamos a los productores en el cuidado de la «salud de sus cultivos» tendiendo un puente directo con la salud de cada argentino con una responsabilidad mayúscula. Brindamos el soporte institucional y tecnológico para que cada vez las prácticas sean mejores, los cuidados sean más eficientes y sean incorporados por más productores.

El acompañamiento de MRI

Fabiana Malacarne, ingeniera agrónoma, investigadora y divulgadora científica, dirige el programa de manejo de resistencia de insectos, acompaña y asesora a las empresas desarrolladoras de cultivos Bt. y trabaja con socios estratégicos como productores de CREA y AAPRESID, monitoreadores de AAPPCE y las Bolsas de Cereales. Hay una labor destacada de MRI recomendando a los productores y capacitándolos sobre las buenas prácticas de manejo de la tecnología Bt, para alargar la vida útil de esta tecnología en la producción de maíz, algodón y soja.

En el último año se han gestionado numerosos puntos de encuentro directo, campañas de divulgación, convocatorias y participaciones destacadas en eventos, en donde MRI se puso codo a codo con productores, empresarios agropecuarios, técnicos y todos los protagonistas interesados en las buenas prácticas, la salud de sus cultivos y los desarrollos tecnológicos:     

• Las jornadas de actualización y capacitación sobre plan de mitigación para Maíz Bt, con productores de maíz de San Luis para discutir los resultados de la 10° campaña del plan de mitigación para barrenador del tallo.
• El Congreso C de AAPRESID, donde Fabiana se destacó en su charla "Cómo comunicar la ciencia".
• La Jornada Nacional de Buenas Prácticas Agropecuarias 2023, en Rio Cuarto. Que nucleó a diferentes sectores de la comunidad agroalimentaria interesados en la toma de decisiones empresariales, técnicas y políticas.
• En el marco del Congreso Internacional del Maíz, en Paraná, Entre Ríos: El panel “Hacelo por mí, hacelo por todos”, con la participación de Lucas Cazado de CREA y Juan Cruz Tibaldi de AAPRESID, compartiendo información valiosa para el cuidado de los maíces Bt y las Buenas Prácticas Agrícolas. También, el Primer Hackaton de Maíz Sustentable, un concurso que invita a jóvenes universitarios y recientemente graduados a participar con iniciativas ligadas al maíz y la sustentabilidad.
• Las jornadas conjuntas de la REM de AAPRESID y Chacra Sachayoj, en Santiago del Estero, para dar visibilidad al aporte de las biotecnologías de semillas, el uso de insecticidas y el manejo inteligente del monitoreo y los refugios en maíz.
• La Jornada de la Red de Maíz Tardío y la Regional de Río Tercero, difundiendo y capacitando sobre maíz tardío y evaluaciones de cultivares en soja.
• La participación y asesoramiento en la incorporación del uso de refugio en la provincia de Córdoba, actualizando su última campaña respecto al uso eficiente del refugio en la siembra de maíz Bt, adoptando las buenas prácticas recomendadas por el Programa MRI / ASA. 

Todos estamos de acuerdo en que «la unión hace la fuerza», y cada uno de los sectores que componen nuestra agroindustria, certifican que la fuerza del campo los une. 

Cuando cada 7 de marzo, hombres y mujeres se miran para desearse un Feliz día del Campo, se agradecen el compromiso y fortalecen estos lazos que se fueron convirtiendo en un gran abrazo nacional.